Como viene siendo habitual, Sergio Busquets aprovechó su don para situarse sobre el campo, leyendo como nadie el juego.
El mediocentro 'culé' robó el balón cuando el Betis pretendía salir a la contra, para coger a los verdiblancos a pie cambiado.
Tras recuperar, Busquets 'sólo' tuvo que girarse y conectar con un Messi que no perdonó y firmó el 0-2.
21 de enero de 2018