A pesar de su juventud, Messi cuajó un partido extraordinario. Dominó el partido al lado de Ronaldinho, en un Barça de leyenda que terminaró levantando la Champions League ese año en París. Y su increíble superioridad no gustó nada a algunos de los jugadores del Chelsea, impotentes ante apenas un crío.
Y es que Messi fue 'cazado' en Stamford Bridge. Recibió durísimas entradas durante todo el partido, pero especialmente una que pudo acabar en tragedia. Tragedia no sólo para Messi, sino para el fútbol. Y es que, si el argentino llega a tener la pierna apoyada en el suelo cuando Del Horno le asestó la patada, bien podría haber terminado su carrera allí mismo.
Una entrada descomunal a la que Messi se consiguió sobreponer. Ni así lo pudo amedrentar Del Honro, que se llevó la tarjeta roja por su lamentable acción. La protestó tanto como su entrenador, José Mourinho, en sala de prensa. Y es que el luso aseguró que Messi hacía "teatro".
"Ha hecho teatro. Catalunya es un país de cultura y sabéis lo que es teatro del bueno, teatro de calidad. Yo he ido al teatro en Barcelona y puedo asegurar que es del bueno", expresó un indignado Mourinho, en uan rueda de prensa que dio la vuelta al mundo.
Aunque el luso no se quedó ahí. Sugirió incluso que sancionaran con un partido a Messi por simulación: "Pueden castigarle con un partido de suspensión para que el niño aprenda, aunque mejor que no aprenda porque sabe mucho".
Frases para la historia que 12 años después siguen en la memoria de todo aficionado al fútbol. Así como la patada y la exhibición de un Messi que ya mostraba credenciales para ser el mejor jugador del mundo en unos años.