Pasillo, fiesta y paliza para festejar el trofeo de campeón de Inglaterra. El City celebró su gran éxito con otra goleada. Ha sido una constante en la temporada.
El equipo de Pep Guardiola no concedió ni un respiro a un necesitado Swansea. Fue directo al triunfo desde el comienzo y pronto llegaron los frutos.
El City es un equipo que gana por acumulación. No tiene un gran 'killer' acreditado, pero llega y genera tanto que los tantos llegan solos.
Si un día no es Agüero, otro día le toca a Silva y Sterling. El primero resolvió con calidad en el área y el segundo remato a gol tras un servicio raso de Delph.
El Swansea fue un quiero y no puedo, pero la tormenta perfecta terminó de sacudir su tunda en la segunda mitad: golazo de De Bruyne a la escuadra y de Bernardo tras un penalti fallado por Gabriel Jesus.
El brasileño, ya en los últimos instantes, remató a gol otro balón colgado al área. Y volvió Mendy tras su grave lesión. "We are the Champions", sonó en el Etihad. Sin duda, la Premier League tuvo un claro ganador.