La Rosaleda no fue benevolente con el equipo blanquiazul, que al menos pudo empezar a disculparse ganando al conjunto donostiarra. Un indulto completo le costará bastante más.
En una tarde rara en Málaga por el duro golpe que es un descenso a Segunda, el cuadro costasoleño cuajó un encuentro serio ante una Real que se desconectó tras el subidón que supuso golear al Atlético de Madrid.
Suele pasar que tras fuertes descargas de adrenalina llegan apagones súbitos. Le pasó a la Real Sociedad, que jugó a ratos, pero no encontró buenas posiciones de remate. El Málaga amagó menos y pegó mejor.
Atinado el Málaga en ataque
Quizá contagiados por el empuje de Lestienne y la sangre fresca de En-Nesyri, el equipo blanquiazul se desplegó correctamente en ataque y la Real Sociedad, quizá esperando a un rival absolutamente KO, se vio sorprendida. Ni Januzaj ni Zurutuza encontraron grietas en el Málaga, tampoco un Odriozola activo por la derecha.
La Real propuso, pero sin mordiente. Y el Málaga, tras un córner, encontró alivio en la aparición de Adrián tras un pase acrobático de Luis Hernández. 1-0 en el minuto once. En-Nesyri, en el 34', puso bien el pie para hacer el segundo tras un buen servicio del Chory.
Directo al mentón de la Real
Con el 2-0, el Málaga acampó en su campo y entre Iturra, Miquel y Lacen disolvieron las acometidas de la Real, que se recuperó del 'shock' con la entrada de Willian José y la mejoría de Juanmi. El Málaga intentaba responder con En-Nesyri y aplaudido Lestienne a la contra.
Una recuperación insuficiente la del equipo de Imanol, como es insuficiente para el malaguista esta victoria cuando numéricamente no sirve para mucho. Quizá pueda quitar algo el hambre, pero ni mucho menos la pena.