La Federación castigó con cuatro partidos al entrenador del Sporting de Gijón, Rubén Baraja, expulsado en el minuto 80 del encuentro frente al Barcelona B, y con dos al técnico de éste, Carlos Busquets, que también vio la roja en el minuto 67 del mismo choque.
Baraja fue expulsado por "sujetar a un adversario, derribándole, estando el juego detenido y cuando se disponía a ejecutar un saque de banda" y Busquets por "protestar de forma ostensible saliendo del banquillo con los brazos en alto una decisión mía, siendo previamente advertido", según el acta arbitral.
Asimismo, el Comité de Competición ha impuesto una multa de 800 euros al Sporting de Gijón y 3.005 euros al propio técnico. Sin embargo, en Asturias otean la sanción de cuatro partidos con cierto 'alivio', rememorando los diez partidos que le cayeron a Enrique Martín en 1999 por cortar un balón.