En esta ocasión los ambos se desplazaron hasta el colegio 'El Salvador', donde fueron recibidos por unos noventa alumnos del centro después de que el equipo sellase el pase a los cuartos de final de la Copa del Rey por primera vez en su historia.
Los jugadores compartieron la tarde con los alumnos, se sometieron a sus preguntas, sortearon merchandising del club, se hicieron fotografías y firmaron autógrafos a los jóvenes allí congregados.
"Poder ver la alegría de los chicos, su sonrisa, cómo te escuchan y ver cómo se ponen por una firma... Es lo mismo que me ha pasado a mi cuando era pequeño y lo que me pasa de grande si veo a alguna de las personas que yo admiro. Es impagable y se disfruta muchísimo", explicó Champagne.
"Siempre es un placer compartir mi tiempo con ellos. Como a ellos, a mi de pequeño me gustaba siempre que estuvieran cerca de mi. A los jugadores siempre que les veía tenía ilusión por preguntarles cosas y por pasar un rato con ellos. Muy contento sobre todo por ver sus caras de felicidad", declaró Naranjo.