El Leipzig se quedó con uno menos en la segunda parte. Naby Keita dejó a los suyos con 10, sufriendo su quinta expulsión en sus siete últimos partidos disputados.
Sin embargo, y lejos de venirse abajo, los locales lograron adelantarse en el marcador gracias a un penalti transformado por Forsberg en el 68.
Cinco minutos más tarde, Thiago Alcántara anotó el tanto del empate aprovechando un buen balón de Jerome Boateng, y el resultado no se movería hasta el final del partido.
La prórroga no cambió el marcador, por lo que la suerte de los penaltis terminó dándole el pase a los de Jupp Heynckes tras el fallo de Timo Werner en el último minuto. Ulreich le adivinó el lanzamiento y metió a los visitante en los octavos de final.