A falta de escasos días para que comience el campeonato mexicano, Cruz Azul mostró su mejor cara ante un rival de entidad como el Oporto y llevó el partido a la tanda de penaltis, en la que se mostró superior.
Y eso que Paco Jémez tuvo que abandonar su banquillo antes del final de la primera parte tras considerar el colegiado que sus protestas eran excesivas tras una falta. Más teniendo en cuenta que el choque era amistoso.
Fue el Oporto el que gozó de más ocasiones en el cómputo general del partido, pero Hernani no aprovechó ninguna de las varias que tuvo y permitió a los locales conseguir el triunfo desde los once metros.
La afición local disfrutó del triunfo de los suyos en un partido especial en el que se pudieron ver fuegos artificiales durante el descanso.