Neymar fue recibido con todos los honores en el estadio, con fuegos artificiales incluidos, ante una afición enardecida por su llegada.
Tras las palabras del presidente, la fotografía de rigor, las primeras palabras y los toques de balón, el delantero dio una vuelta de honor al estadio para repartir autógrafos y balones.
El brasileño también tiró su camiseta, algo inolvidable para el afortunado aficionado que la cogiese, antes de marcharse al vestuario.
Mon petit vient me saluer #Neymar #PSG @Havas_SE_Fr pic.twitter.com/4w25PP5GV3
— Georges Assou (@georgesassou) 5 de agosto de 2017