Neymar Junior y, sobre todo, su padre quieren ser los mejores del mundo. Quieren ocupar el trono del fútbol mundial y entienden que están preparados, según diversas fuentes, en ganar el soñado Balón de Oro. Y creen que en el Barça eso es casi imposible.
Y lo es por culpa de un tal Leo Messi. El poder de atracción de argentino su imagen dio la vuelta al mundo el día que Neymar cuajó uno de sus mejores partidos y realizó una gesta que quedará en los anales de la historia del fútbol.
Eso molestó y mucho al padre del jugador, según dichas informaciones, que cree que su hijo tiene capacidad para liderar él sólo cualquier equipo del mundo. Ve a su hijo siendo la gran estrella de un equipo que pueda optar a los mismos equipos que el Barça, es decir, a todos.
Pero, además del rol deportivo, también cabe destacar el económico. Neymar no va a ser nunca el mejor pagado de un equipo en el que este Messi. En el PSG su salario se dispararía hasta límites a los que el Barça no puede llegar.
Messi sería en buena parte responsable, involuntario, de la salida de Neymar al PSG si se termina concretando.