El Barcelona llegará al José Alvalade con un doble objetivo. Por un lado, los de Valverde buscarán la segunda victoria en Champions, que afianzaría su posición en el grupo; mientras que el segundo propósito será dejar atrás los fantasmas de sus últimos viajes por Europa.
No cabe duda de que es otro proyecto, otro entrenador y otros jugadores. Otra historia a fin de cuentas. Pero no es menos cierto que el parcial en los últimos seis partidos fuera de casa en Champions dejó un parcial de 5-13 en contra del Barça.
Sólo dos victorias, conseguidas ante Celtic (0-2) y Borussia Mönchengladbach (1-2) y cuatro derrotas a cual más sonrojante. La más alejada de la actualidad, la que se llevó en el Calderón en la vuelta de los cuartos de final de la Champions 15-16. Aquel día, los de Simeone vencieron 2-0 y cerraron cualquier vía a los azulgrana.
Ya el año pasado, el City se 'zampó' al equipo entrenado por Luis Enrique, en un ejercicio de intensidad, velocidad y acierto ofensivo (3-1).
Más adelante llegó el bochorno del Parque de los Príncipes (4-0), aunque aquella derrota quedó en nada después de la épica remontada en el Camp Nou. La última salida, no la olvidarán los barcelonistas, reflejó un 3-0 en casa de la Juventus a la que el Barça no pudo poner remedio en la vuelta, quedando fuera de las semifinales de Champions.
Con Valverde el equipo ha recobrado la confianza y en Portugal tiene una buena prueba para seguir demostrándolo. Espera el Sporting, espera la Champions.