Y es que seguro que todos los aficionados del Sporting de Lisboa recuedan la exhibición que Leo Messi ofreció en la temporada 2008-09 cuando el Barça, con Guardiola a la cabeza, se llevó un contundente 5-2 de Portugal a casa.
Concretamente, el 26 de noviembre de 2008, en un partido en el que Leo Messi brilló con luz propia en casa de Cristiano Ronaldo. El propio delantero argentino anotó el tercer tanto de los azulgranas en el minuto 49 y fue vital para la victoria de los suyos, ofreciendo clase y maestría sobre el terreno de juego del José Alvalade.
Henry, en el 14, Piqué, tres minutos después y Bojan, en el 73, culminaban la goleada de los 'culés' en Lisboa, con la ayuda de Marco Caneira, que se anotó en propia puerta en el minuto 67.
Un día que pasará a la historia por la goleada de una orquesta azulgrana bendecida por su director, el Dios Messi.