Y es que, el cuadro lisboeta es uno de los equipos 'top' que menos dinero ha gastado en este mercado de fichajes. Y no será por falta de fondos, ya que en el Estadio Da Luz han vendido muy bien este verano.
Concretamente, con las ventas de Ederson (City), Lindelöf (35), Semedo (30) y Marçal (Lyon), el Benfica ha superado los 110 millones de ingresos, a los que le suman otros 4 por las ventas de jugadores de segundo nivel.
Pero, pese al gran montante recibido, el jugador más caro que han fichado es Krovinovic, un centrocampsita serbio de 21 años que costó 3 millones y procedía del Rio Ave.
Adiós a sus grandes estrellas y hola a jugadores poco conocidos... ¿estarán preparando alguna bomba para el final de mercado?